¡¡Uis que linda es la vida!!!, creo que me gustara estar en el aire-
Contempló a sus hermanas que flotaban alrededor, recién nacidas también y avanzó dando tumbos por la habitación.
¡¡¡Uhmmmm es divertido empujarse!!!
Se rozó con las otras pompas estirándose y formando divertidas figuras.
La pequeña pompa de repente… descubrió que allí abajo había un extraño resplandor rojizo, que se estiraba y se alargaba de diferente manera—
¿¿Que es eso?? ¿¿Que clase de jabón- madre habrá tenido???
Me acercaré y le preguntaré si quiere que seamos amigas.
Las demás pompas gritaron.
¡¡ No , no no te acerques!!!.
¿Porqué? Les respondió,.- Esa linda pompita extraña parece divertida y es luminosa.
Pero, vamos a ver. ¿No te ha dicho mamá que no se debe intimar con extraños?
Si, muchas veces, pero mírarla, se retuerce y gira y gira.¿ Que daño puede hacernos? Mamá puede ser a veces muy protectora.
Por una vez…. No pasará nada
La pompita bajó hacia ras de suelo. para hablar con la extraña criatura rojiza.
¡Hola! ¿Quieres ser mi amiga? Me llamo Jabonosa y tu?.
Yo soy Chisporroteo.- contesto la forma. ¿Como te atreviste a bajar aquí?? Quizás te pueda hacer daño-
Quiero ser tu amiga , no tengo amigas y mis hermanas no me hacen caso.-dijo Jabonosa
A mi me pasa lo mismo aquí estoy encerrado en este cuadradito sin salir.¡¡¡Seamos amigos de acuerdo1¡¡¡.
Durante unos minutos los dos , Jabonosa y Chisporroteo se divirtieron empujándose pero---- poco a poco notaron que ambos perdían fuerzas y se debilitaban.
Chisporroteo miró a Jabonosa y le dijo
Creo que nos estamos muriendo. Tu me apagaste a mi con tu humedad y yo con mi calor te deshice.Pero no quiero que nos separemos.
Si, tienes razón.- contesto Jabonosa con voz débil. Yo tampoco quiero estar sola nunca más.
Cuando horas más tarde los dueños de la casa volvieron a por los niños que celebraban un cumpleaños haciendo pompas de jabón cerca de la chimenea, notaron que,en un rinconcito , un pequeño charco abrazaba amorosamente a un tizón apagado
Y en el cielo--- unas partículas de agua y cenizas subían a las estrellas para seguir jugando siempre.